Un bootcamp es una metodología intensiva de estudio enfocada a adquirir conocimientos prácticos y específicos relacionados con el desarrollo de software. Esta metodología empieza a ser muy práctica y utilizada por los “nuevos” profesionales.
El fenómeno de los ‘bootcamp’ nació allá por 2012 en EE.UU. Los estadounidenses fueron los primeros en incursionar en estas formaciones intensivas y de rápida salida laboral. Un estudio de Course Report arrojó que la mayoría de los graduados de bootcamps encuentran trabajos full-time y un 79% de ellos dijeron que en sus nuevos empleos necesitan aplicar las habilidades técnicas aprendidas en el curso.
Sobre este boom POST conversó con Sebastián Buffo, Co fundador de Le Wagon LATAM, quien hizo hincapié que este tipo de formación busca darle al alumno una inserción rápida en el mercado. Por eso, “en vez de enseñarte todo lo que vendría a ser la teoría, te enseña la práctica y lo que las empresas necesitan”.
“A nivel global, existen tres tipos de formatos”, ilustra Buffo, y agrega que en Latinoamérica se han desarrollado dos de ellos principalmente. “Uno es full time -tiempo completo-, en el cual las personas dedican nueve semanas, de lunes a viernes, de 9 a 19. Es una formación completamente práctica. Tienen una clase a la mañana, por ejemplo, de una hora y media, y después todo el resto del día es práctica: los alumnos hacen ejercicios con la supervisión de los profesores y la plataforma”, profundiza el referente.
El segundo tipo de formato es el part time. A diferencia del otro, posibilita que las personas hagan el bootcamp y, a la par, sigan trabajando. Éste se desarrolla dos veces por semana -por ejemplo, martes y jueves-, de 19 a 22 horas, y el sábado todo el día, de 9 a 19 horas. Y aclara que “en vez de durar nueve semanas o dos meses, el modelo part time dura seis meses”.
Según explicó el cofundador de Le Wagon, los formatos de bootcamps más difundidos en Argentina y la región tienen que ver con desarrollo web, es decir, “todo lo asociado con ingeniería y software”. Después surgieron los que están más enfocados en ciencia y análisis de datos, “como diseño de UX y UI”, ejemplifica Sebastián Buffo.
El fenómeno, desde adentro
Santiago Scanlan, fundador y CEO de Plataforma 5, introduce el concepto de los “coding bootcamps”, cursos intensivos de programación. La propuesta de la empresa es la siguiente: empezar desde cero y, después de cuatro meses de estudio full time, entrar a trabajar como programador.
“No hay límite de edad ni tiene requisitos previos. Tenemos como alumnos desde abogados, ingenieros y contadores hasta cajeras, repositores de supermercado y taxistas. Los llevamos desde cero hasta un primer trabajo en programación en pocos meses”, cuenta Scanlan.
En esta línea, más datos brindados por Course Report en su informe, que tomó información de 101 bootcamps alrededor del mundo, muestran que quien asiste a este tipo de cursos suele tener título de bachiller y cuenta, por lo general, con siete años de experiencia laboral.
El CEO de Plataforma 5 comparte algunos detalles sobre la cursada. En estos casos, es full time, de lunes a viernes, diez horas por día y durante catorce semanas. En la academia se especializan en el desarrollo de aplicaciones web y móviles. Se aprende a desarrollar una aplicación desde cero, de punta a punta, una de las habilidades más demandadas hoy en el mercado.
Y van por más, dice Scanlan: “Adicionalmente, estamos lanzando un nuevo bootcamp especializado en Salesforce, que es una tecnología con muchísima demanda a nivel mundial, que abre las puertas a un mercado impresionante y con salarios altísimos”.
Un cambio de paradigma
Para Scanlan, la propuesta diferencial del bootcamp es que está 100% enfocado en una inserción laboral rápida: “Enseña las herramientas reales que las empresas necesitan en muy poco tiempo. La universidad, por el contrario, obliga al alumno a estudiar muchísimos temas que no son relevantes para el trabajo, a un ritmo extremadamente lento, con carreras que se prolongan por seis, siete u ocho años”.
“La gente acude a un bootcamp, no por un título, sino para adquirir capacidades concretas que le permitan insertarse laboralmente”, responde Sebastián Buffo. Y completa: “Lo que le importa a las empresas es que tengas la capacidad de ejecutar, de entregar lo que ellos están pidiendo. En este marco, cada vez es más importante la parte práctica más que la parte teórica”.
Muchas veces, agrega el cofundador de Le Wegon, la gente va por una “reconversión laboral en poco tiempo”, y las personas que salen de estos programas están con muchas ganas de aprender. “Son como juniors con hambre de aprender y hacer”.
El estudio de Course Report mostró que la mayoría de los graduados de bootcamps encuentran trabajos full-time y un 79% de ellos dijeron que en sus nuevos empleos necesitan aplicar las habilidades técnicas aprendidas en el curso.
Otro de los terrenos ganados por los bootcamp tienen que ver con la paridad de género. Course Report arroja que en 2020 un 41% de las graduadas fueron mujeres y, tras terminar los cursos, tanto ellas como los hombres reportaron sueldos similares
Según CEPAL, menos del 40% de la población posee conocimientos básicos de informática en América Latina. Si se consideran aspectos más técnicos y complejos, la cifra se reduce al 25%. Y, por último, si se trata de haber escrito algún programa informático utilizando un lenguaje de programación, el promedio cae cae al 7%.
2 comentarios
A quienes esta dirigido? Que experiencia previa seria necesaria o título afin habria q tener? Gracias
Hola ,mi nombre es Patricia me encanta aprender todo este mundo de desarrollador web tengo 51 años no hace mucho empiezo a explorar toda esta tecnología