Los Gobiernos, en sus distintos niveles, requieren de financiamiento, por lo que acuden a instrumentos públicos como los bonos públicos para financiarse. Desde POST te contamos su funcionamiento y cómo invertir en ellos.
A la hora de encarar un proyecto, es común necesitar financiamiento parcial y, en algunos casos, total. Si se trata de personas físicas, lo habitual es que solicite un crédito en una entidad financiera.
De tomarlo, se comprometen a un método de amortización y tipo de tasa de interés, fija o variable, definida por la empresa con la que decidieron operar. En cambio, cuando la necesidad de obtener fondos surge por parte de una empresa o del propio estado, es común que recurran al mercado de capitales debido a la magnitud de capital que suelen requerir.
¿Qué son los bonos públicos?
Se trata de un préstamo que realizan ciudadanos, empresas y/o inversores internacionales hacia un gobierno, a través del mercado de capitales. El estado puede ser nacional, provincial o municipal y, a través de un documento, se compromete a devolver el monto prestado (capital) en una fecha de pago y a pagar intereses.
Por lo general, estos últimos los suele abonar de forma periódica, conocido como cupones, a lo largo del tiempo. Según su plazo, es el horizonte de inversión:
- Corto plazo: vence en menos de un año.
- Mediano plazo: la duración es de entre uno y cinco años.
- Largo plazo: tienen un vencimiento mayor a cinco años.
¿Para qué se utilizan los fondos y qué riesgos asociados tiene?
Habitualmente, son una fuente de financiamiento para proyectos grandes de infraestructura como la construcción o mejora de rutas, escuelas y hospitales.
También se suelen usar para equilibrar las cuentas fiscales o para realizar políticas económicas como, por ejemplo, incentivar las colocaciones en moneda local.
Con respecto a los riesgos, hay factores para tener en cuenta como la estabilidad del país emisor y su calificación crediticia. Mundialmente, se considera a los Bonos del Tesoro de Estados Unidos como los más seguros del mundo.
Las calificadoras de riesgo evalúan con letras la calidad de los bonos, siendo los de carácter “especulativo” los más riesgosos, mientras que los que poseen grado de “inversión” son los más seguros.
En nuestro país, los más conocidos son:
- Bonar: bonos en dólares emitidos a mediano y largo plazo.
- Letras del Tesoro (Letes): Instrumentos orientados a corto plazo.
- Bonos ajustados por CER: ofrecen rendimientos que se ajustan por inflación. Esto los hace atractivos en contextos inflacionarios.
¿Cómo invertir en bonos?
Para invertir en estos instrumentos, se debe tener una cuenta de inversiones habilitada en el Banco. En caso de cumplir con este requisito, simplemente se debe seguir el siguiente procedimiento:
- Ingresar a online banking.
- Hacer clic en “Menú”.
- Dirigirse a la sección “Inversiones”.
- Seleccionar “Acciones, Bonos y CEDEARs”.
- Elegir el tipo de bono y realizar la operación.
También es posible llevar a cabo la operatoria comunicándose al 4341-3050 o desde el interior al 0800-333-1401.
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